jueves, 4 de agosto de 2011

Capitulo 38: insignificante hechicera

Llegamos al lugar donde se supone que debería de estar mi nuevo profesor, pero cuando llegamos al lugar un montón de mujeres llorando y chismoseando lo acontecido
Leysi: ¿Qué Pasó?
Nadie le contestaba
Leysi viendo que nadie quería contestarle tomó una de las jarras de vino y la estrello contra el piso, todos la voltearon a ver y con una voz firme y segura dijo:
Leysi: soy Dea Sandoval y más le vale que me digan ¿por qué carajos es el alboroto?
Uno de los hechiceros más débiles de poder como dirían los Kaulitz, un hechicero impuro se acercó a decir
Leysi: Su nombre y hábleme fuerte y claro para escucharlo
X: me llamo Arlusio y lo que ha acontecido en estar dura tarde es que el hechicero Jörg, dueño del poder de las estrellas a capturado a un gran hechicero que estás tierras han podido ver y lo ha asesinado
Leysi: no me digas que estáis hablando de Dionisio
Arlusio: en efecto
Leysi: hay no puede ser (se llevó sus manos a la cabeza y se sentó en un banco de madera)
Jeny: Dea ¿Qué pasa?
Leysi: que ese señor iba a ser tu maestro Regina y en efecto es uno de los mejores hechiceros que estas tierras haya podido ver y ahora está muerto
Jeny: no puedes estar hablando en serio
Leysi: temó que si estoy hablando muy en serio Regina
Jeny: ¿y ahora?
Leysi: hay que ir a hablar con mi padre, lo más pronto posible ¡Corre!
Ella salió corriendo y yo más detrás y de repente choqué con Edward.
Edward: lo siento, no fue mi intención, no te vi
Jeny: tranquilo, yo era la distraída
Leysi: ¡Camina Regina! (tomándome de la mano)
Otra vez tocamos la puerta a Louis y…
Louis: ¿qué está pasando para que vengan ante mí de esa manera?
Leysi: Padre es Dionisio, Jörg lo ha encontrado y lo ha mandado lejos de este mundo
Louis: ¿qué estáis diciendo?
Leysi: lo que has escuchado padre
Louis: ese desgraciado
Leysi: Padre ¿Qué haremos con Regina?
Louis: no lo sé
Uno de los hechiceros más viejo que seguía a Louis se acercó y dijo
X: ¿Y sí la mandamos a una escuela como los chicos de su edad?
Todos miramos a Louis.
Louis: ¿Usted cree, Sabio anciano que está bien mandarla a algo tan inseguro?
X: no lo considero inseguro ya que pues creo que Jörg no buscaría a la hechicera de la luna entre un montón de chicos de escuela, además tampoco él ha de saber que la señorita Regina está con nosotros, se la imaginara pues, vagando por el bosque
Louis: son muy bien dichas sus palabras y gracias a usted por su idea, Regina a partir de mañana iras a una escuela, pero yo me encargare de que te metan mano dura, más que a los otros chicos, necesitamos que aprendáis lo más pronto posible
Jeny: yo aré lo que creas mejor para mí
Louis: no se hable más, Dea guía a Regina a sus aposentos, porque mañana la espera un duro día, aprenderá lo que muy pronto será su destino
Leysi me llevó a mi habitación, era realmente hermosa, acaricia mis ante brazo el frio era inmenso pero la verdad es que me encantaba, me quite la chaqueta y los tenis e incluso los zapatos
Leysi: ¿no quieres darte un baño?
Jeny: la verdad si me encantaría
Leysi: abriré los grifos para que se vaya calentando un poco el agua y no te congeles
Jeny: muchas gracias
Entre al baño y abrí el grifo, el agua empezó a recorrer mi cuerpo era tan calmante, de repente llegaron cosas a mi mente,

sobre si mis padres los Betancourt estarían pensando en mí o que sí estoy bien o de por qué no los he llamado, a pesar de todo me hacen mucha falta, estaba entre mis pensamientos cuando sentí como unas manos rodeaba mi cuerpo, me sentí como protegida, di la vuelta inmediatamente pero no había nadie, llegó a mi mente aquel ingrato que quería acabar con mi vida, en sus ojos en su perfecto cuerpo en su sonrisa y esos labios tan rojos como la sangre, ¿Qué me pasa? Es mi enemigo, debe morir o yo lo haré, en esta guerra solo uno de los dos caerá y no pretendo ser yo, atrás contigo Bill Kaulitz. Salí y me puse una ropa que Leysi había dejado para mí parece, me acosté sin pensarlo dos veces, estaba realmente cansada y ni cuenta me di cuando me quedé dormida.
Al día siguiente una de las empleadas del castillo de Louis, me bañé y baje corriendo a ¿desayunar? La comida estaba lista en una gran mesa, no me quedó de otra que comer, cuando terminamos uno de los empleados de Louis nos escoltó hacía aquella escuela, era completamente diferente a las de mi “dimensión” no sé ni siquiera como explicarlo, estaba tan concentrada que tropecé con alguien
X: Fíjate por donde vas
Leysi: más cuidadito de con quien estás hablando
X: no me interesa

Aquella chica se marchó
Leysi: ¬¬ Uish, bueno no importa mira Jeny nos tocan clases diferentes, pero nos vemos a la hora de salida aquí ¿sí?
Jeny: claro no hay problema
Empecé a buscar salón por número, noté que eran demasiados hechiceros y yo que pensé que no era posible, pero lo raro es que ambos clanes estaban juntos, la escuela de por sí estaba en medio de ambos reinos por decirlo así, supuse que era la única escuela y los clanes no les importaban mucho a los profesores porque eran tanto guardianes de la luna como de las estrellas, eso me dijo Leysi de camino, pero a los chicos les importaba y mucho tanto que la escuela en el descanso o cambio de clase se dividían, en fin, entre a mi aula y todos me miraron como bicho raro, creo que me entienden a qué me refiero sé que no soy la única que le ha pasado, el profesor me presentó y yo no dejaba de mirarlo, porque no era humano eso lo tenía claro ¿qué carajos era entonces? No pude quitarle los ojos de enzima incluso cuando me senté no dejaba de ver que cosa era...

me dijo que su nombre era Tebo, en fin, me fui a mi lugar y cuando vi a mi lado, “mi compañera” me quedé con cara de O.o ¡no puede ser! Era ella la chica con la que me tropecé al entrar
X: ¡Ash! Profe será que me puede cambiar de lugar, no quiero estar junto a está
Tebo: señorita Dall, no me interrumpa, estoy a punto de empezar mi clase
Dall se sienta
Jeny: oye mira lo siento, empezamos con el pie izquierdo, yo no estoy aquí para hacer enemigos, estoy aquí para aprender, Porfa no te conviene ser mi enemiga
Dall: ¿Por qué no? tú no eres nadie para mí, lo notó en tus ojos y sé que eres una insignificante hechiera, que solo vino a perder el tiempo, no te atrevas a volver a decirme tal estupidez, porque soy capaz hasta de lo que no te imaginas, nadie en está escuela es más poderoso que yo y puedes preguntar a quien tú quieras si te da la gana
Jeny: (la tome del cuello de su uniforme) -como te atrevez a decirme "insignificante hechicera"
Dall: no me toques
Sacó su barita y me la colocó en el cuello
Jeny: O.o

No hay comentarios:

Publicar un comentario

.